Descripción del documento

El inicio de la cruenta represión franquista en Ronda es, como en muchos otros lugares, resultado en buena parte de la contestación a la potencia obrera, sindical, en la etapa republicana, fundamentalmente tras la victoria del Frente Popular en febrero de 1936, y desde luego de su movilización tras el estallido de la sublevación.

De hecho, con el golpe militar del 18 de julio, la respuesta obrera y campesina no se hace esperar en Ronda y dos días más tarde se produce una gran concentración de toda la comarca en la ciudad de Ronda con el objetivo de defender el régimen republicano.

El avance franquista de la columna de Cádiz y la ocupación de Grazalema hizo que Ronda fuera ocupada el 16 de septiembre de 1936.

Muchas familias huyeron, encontrando algunas de ellas a su regreso sus bienes incautados y expoliados, y a las nuevas autoridades esperando para iniciar su proceso represivo.

El patio número cinco del cementerio de San Lorenzo de Ronda (Málaga) albergaría cuatro fosas donde se encuentran, según testimonios orales, 1.607 víctimas de la represión franquista. Su perímetro, bastante amplio, se encuentra tapado por una fuerte capa de hormigón que durante la dictadura protegería los restos de posibles expolios.

La fosa se ubicaría a las afueras del actual camposanto. Los testimonios orales recuerdan cómo fusilaban en grupos de siete y ocho personas a escasos metros de la tapia del cementerio para ser arrojados a la gran fosa.